Hace unos años, mi mujer, María, tuvo que enfrentarse al duro golpe que supone perder a un padre. Yo ni siquiera me incluyo en la frase anterior, pues creo que mi tristeza ni siquiera se debe acercar al dolor que se siente cuando es tu padre. Un ictus. Así, sin más. Él vivía solo, y María había quedado a comer con él, pero ese día llamó al timbre, y no le abrió la puerta…
Dicen que el tiempo todo lo cura, pero hay experiencias que te marcan. Desde entonces, María sufría mucho por su madre, porque también es mayor y vive sola. Muchas veces le llamaba, sólo para ver qué tal estaba, y no le cogía el teléfono. Si en un rato le volvía a llamar y seguía sin cogerlo, os podéis imaginar. Por desgracia, esto sucedía muy a menudo, y llegó a ser un problema. La de veces que tuvimos que ir a su casa sólo para comprobar que estaba bien…
Intentamos buscar una solución, y por muchas herramientas que probamos, ninguna nos daba la tranquilidad que necesitábamos. Pero yo no dejé de darle vueltas, y se me ocurrió que, si pudiéramos localizarla con su móvil, y a la vez pudiéramos conectar con su cámara y su micro, podríamos saber en todo momento dónde estaba, y lo que allí sucedía. Sería como poder estar a su lado en cualquier momento. Tras mucha búsqueda, no encontré nada que lo hiciera, y aunque no tenía experiencia, decidí que lo iba a hacer yo.
Tuve que empezar pidiendo ayuda, y por suerte la encontré en unos amigos, Paco y Sergio, a los que agradezco enormemente su implicación para ayudarme a iniciar el camino. En unos meses, tuve una primera versión de Confidant, y lo primero que hice fue comprar un smartphone para la madre de María, porque ella aún utilizaba un móvil antiguo sin Internet, e instalarles la app. Supongo que sería por nuestra situación particular, y la experiencia que habíamos vivido, pero desde entonces nos cambió la vida. Los momentos de angustia que sufría María no volvieron a repetirse, porque siempre podía saber que su madre estaba bien.
Bueno, siempre siempre no. En algunas ocasiones, su madre tocaba sin querer la pantalla, y quitaba la conexión de datos, la ubicación, o ponía el modo avión, por no hablar de los mensajes que mandaba sin querer a los contactos. Yo ya me había adentrado en el mundo de la programación, y cada necesidad que veía, se traducía en unas cuantas noches sin dormir, para implementar la función que la resolviera. Añadí así las funcionalidades para bloquear apps, impedir que se desconecten las redes y la ubicación, o subir el volumen de su móvil si lo tiene en silencio (esta última la puse por mi madre, que está como una rosa, pero siempre tiene el móvil en silencio, jeje, ¡mamá te quiero!).
Cuando me di cuenta, tenía una app súper completa, y quien la veía flipaba con todo lo que podía hacer. Me había esforzado para hacerlo todo lo mejor posible, y aunque desde un principio quería publicarla para ayudar a todo el mundo que tuviera la misma necesidad, no había pensado realmente cómo hacerlo. En ese momento estaba yo solo con el desarrollo, así que nuevamente busqué ayuda, y conocí a Toni, que es un crack, y me ayudó a preparar la app para publicarla. Una vez lista y publicada, aunque no había hecho un lanzamiento comercial, empecé a comprobar que ya estaba ayudando a muchas personas, y decidí que tenía que dejar mi anterior trabajo, poner toda mi dedicación al proyecto, y formar un equipo de loc@s emprendedor@s con la misma ilusión que yo. También vi que había muchas áreas donde tenía que formarme, y me costaba ver cuál era siguiente paso para ir en la dirección correcta. Por suerte, presenté el proyecto a Lanzadera, y fue seleccionado para entrar. La verdad es que todo me condujo aquí casi sin buscarlo, y no puedo estar más agradecido al destino. De repente, estamos en unas instalaciones increíbles, rodeados de otros proyectos geniales, y un equipo de personas alucinante nos forma, y nos ayuda cada día para crear unas bases sólidas sobre las que desarrollar el proyecto. Carlos fue el primer loco emprendedor que se sumó al equipo, y a quien agradezco todo su esfuerzo y pasión cada día. Seguimos creciendo, trabajando duro, y muy ilusionados con el lanzamiento de Confidant, que, gracias a Ricardo y Laura, vamos a hacer con La Sexta. Aún me cuesta creerlo, pero sí, nuestra primera comunicación va a ser en las noticas de La Sexta. Gracias por confiar en nosotros.
Y hasta aquí. Mañana se emite la noticia, y no sé qué va a pasar. Nosotros estaremos aquí currando para conseguir ayudar a más gente como María.